De norte a sur en camión
18/10/2012
En casa de mis padres, mi padre llama a la empresa de transportes que conoce del trabajo.
- Que día quieres salir?
- A partir del día 15, cuando antes mejor.
- De acuerdo, tenemos un transporte que sale para Sevilla el quince, que te parece?
- Ufff, no, aaaah, si, venga... vamos alla!
El quince por la mañana, menudo día para recordar.
Las últimas despedidas, las que más duelen i las que durante más tiempo se recuerdan.
Llego a la fábrica donde me espera el camión, primero tenemos que ir a la central de transportes i allí subiré a otro, que parte a sevilla. En la central subo al camión de Luís, un granadino "mu salao", cargamos el camión de leche y nos vamos. Primera parada Alicante, donde llegamos a medianoche, preparamos las camas y nos echamos hasta las 6h de la mañana, descargamos y nos vamos pitando hacia Sevilla, no hay tiempo que perder en este duro oficio. Siempre pendiente de que suene el teléfono y sea el jefe que te llama para decirte que después de descargar tienes que ir 1000 kilómetros al norte, a cargar otra vez i después ya te llamaré para saber donde va esta carga, que todavía no está claro.
El pie izquierdo del freno quiere que pares y te vayas a casa que hace una semana que no vés a tu mujer e hijos; el pié derecho del acelerador quiere continuar, esta es su vida, su camión, sus carreteras, uno se hace en el camión, y es que se necesita dinero para pagar la letra del camión nuevo, la hipoteca, los tatuages de la hija de dieciocho años, etc.
Llegamos a Sevilla a descargar el resto de la carga. Mi viaje en camión termina aquí. Que voy a hacer ahora? No lo sé. Ir al centro de la ciudad y buscar una casa ocupada, por ejemplo. Y es que no me puedo permitir una noche de hotel español.
Mientras hago la mochila viene Luís a la cabina y me dice que ha llamado el jefe, que le ha salido una carga a Medina Sidonia, quizá te interese, es más al sur, dormimos en el camión y te puedo dejar mañana sobre la misma ruta que va a Algeciras! Esto es fantástico!
Arranca el camión, pone la primera y reanudamos la marcha. Llegamos al cortijo en cuestión donde mañana cargaremos unos palets de boniatos.
Vuelve a llamar el jefe, mañana cuando hayas cargado aquí tienes que terminar de llenar el camión a Almeria y luego tienes que ir a descargar a Inglaterra. Miramos el mapa, Bingo! La ruta que tiene que tomar para Almeria pasa justo por Algeciras!
Siento que el viaje me sonríe y me guiña el ojo.
Así pues, termino los tres días de carretera con Luís y su camión en un centro comercial próximo a la ciudad de Algeciras, donde me subiré al ferri que cruzará los quince kilómetros que me separan de África.
Mil gracias Luís.
Adiós Espanya.
Hola Marruecos.